Entrar a competir en el mundo laboral actual es cada vez más difícil para los jóvenes que empiezan a construir su futuro. Por eso resulta casi imperioso el que tengan que obtener un título universitario, que si bien no es garantía de hallar un trabajo que cumpla con sus expectativas, aumenta en gran medida las posibilidades de lograrlo, teniendo en cuenta la alta competitividad en el mundo globalizado de este siglo.
Una de las variables que mayor peso tiene en la decisión de iniciar una carrera universitaria es definitivamente el tema económico, en el que no solo se debe contemplar el valor de la matrícula si no también los gastos asociados a estudiar en una universidad durante cinco años o más, como lo son la alimentación, transporte, materiales, entre otros.
UNA NOTICIA QUE CAMBIA LA VIDA
En 2005, Ángela Corso, hija de Mesías Corso -supervisor eléctrico que ingresó a Enel - Emgesa en el año 1984- obtuvo el cuarto puesto en las pruebas Icfes (pruebas de Estado para la educación superior). El padre orgulloso del gran logro que su hija había alcanzado, se acercó al área de Recursos Humanos de la compañía en busca de alguna ayuda económica para Ángela, quién estaría próxima a empezar la universidad.
A finales de 2007, con menos de 20 años de edad, ella cursaba cuarto semestre de Finanzas y comercio internacional y economía en una universidad colombiana; sin embargo, por sus buenas calificaciones y luego de un concurso había sido aceptada en la Universidad de Toulouse (en Francia) como parte de un convenio internacional entre las dos universidades. Su padre, nuevamente decidió acudir a la empresa para solicitar apoyo financiero, y así poder cumplir el sueño de su hija.
Mientras Ángela alistaba las maletas para su viaje al viejo continente, sin tener claro cómo financiaría sus estudios y estadía fuera del país, su padre regresó a casa, luego de la jornada habitual de trabajo, con una gran noticia: “Hija, la compañía nos ayudará con el pago de tu matrícula de la universidad en Francia”. Desde ese momento, el futuro profesional de Ángela dio un giro, permitiéndole alcanzar grandes éxitos.
IMPULSANDO LA CONSTRUCCIÓN DE UN MEJOR FUTURO PARA NUESTROS JÓVENES
A partir de esta experiencia en la que pudimos potenciar la carrera profesional de una joven talento como Ángela Corso que hoy es profesional en Finanzas y Comercio Internacional y Economía (con doble titulación), y es Jefe de Auditoría Interna en nuestra compañía, a la que ingresó en el 2011 para realizar su práctica profesional, comprendimos la importancia de apoyar a los jóvenes, como una forma de aportar al progreso y desarrollo de nuestro país. Desde 2007 implementamos el “Plan Beca a la Excelencia”, creado para los hijos de nuestros empleados, en el que cada año la compañía otorga una beca a dos de los jóvenes que han obtenido los mejores resultados en las pruebas de Estado Saber 11, para que tengan la posibilidad de ingresar a la educación superior, cubriendo los gastos de la matrícula del programa, durante el cual deben tener un excelente desempeño, manteniendo un promedio mínimo establecido por semestre.
En los 11 años que el programa se ha implementado, la empresa ha otorgado la beca a la excelencia a 22 hijos de trabajadores, logrando que puedan estudiar en la universidad de su preferencia, y haciendo realidad su sueño de poder tener un mejor futuro para ellos y sus familias.
“Gracias a la Beca a la Excelencia que ofrece la compañía a sus trabajadores, hoy estoy cursando cuarto semestre de Ingeniería de Sistemas en la Universidad de Los Andes, un gran logro para mi familia y para mí, que no hubiera sido posible sin este beneficio”
