Tren de Occidente - Aula Sensorial VITA - Centro de Discapacidad Manuel González

Cuatro toneladas de historia

Todo comenzó con la construcción de la Subestación Eléctrica Tren de Occidente, una obra grande, técnica, de esas en las que se tienen en cuenta a la comunidad. En lugar de desechar los residuos de obra, Enel decidió transformarlos. Cuatrotoneladas de materiales, que normalmente terminarían en un relleno, fueron reutilizadas para dar vida al aula sensorial VITA.

Nueve módulos y más de 100 posibilidades

El aula sensorial VITA no se diseñó desde la teoría; se construyó desde la escucha. Los módulos que hoy ocupan el espacio fueron pensados junto a terapeutas, docentes y cuidadores del Centro. ¿Qué necesitan los niños? ¿Cómo aprenden mejor? ¿Qué los estimula, qué los calma, qué les da confianza? Las respuestas llegaron con formas, texturas y sonidos. Así nacieron los nueve módulos de estimulación multisensorial: con libros táctiles, luces que cambian de color, sonidos envolventes, texturas suaves y rugosas, e imágenes pensadas para despertar recuerdos o sensaciones.

Una inauguración cargada de curiosidad y magia

La inauguración fue magia pura. Niños y niñas recorrieron cada rincón del aula con una mezcla de curiosidad y alegría. Sus manos se deslizaban por los materiales, sus ojos seguían las luces y sus risas llenaban el lugar.

Un aula, muchas manos, infinitas posibilidades

Gracias al trabajo conjunto entre Enel Colombia, la Secretaría de Desarrollo Social de la Alcaldía de Facatativá, terapeutas, diseñadores, padres y niños, hoy podemos decir que entregamos una herramienta que abre puertas, despierta capacidades y mejora vidas.

Convertimos los residuos en esperanza y en una nueva forma de sentir el mundo​

Convertimos los residuos en esperanza y en una nueva forma de sentir el mundo